Llegar a casa, preparar un baño de pies y ver la tele. ¿Qué te parece?


De acuerdo al diccionario Merriam Webster, el estrés se define como un factor físico, químico o emocional que causa tensión corporal o mental y puede ser un factor causante de enfermedad (o) una condición resultante de estrés; en particular, una tensión corporal o mental como consecuencia de factores que tienden a alterar un equilibrio existente (estrés relacionado con el trabajo, por ejemplo). 

De hecho, hoy en día, el estrés es parte de nuestra vida diaria y existen muchas medidas preventivas que pueden ayudar a reducir el estrés y a tratarlo de una manera natural, sin recurrir a métodos artificiales o químicos.

Los investigadores han demostrado que el hecho de alternar momentos de placer con las circunstancias que nos causan estrés puede reducir la percepción del estrés casi en su totalidad y lograr, así, una jornada de trabajo más placentera.

Esto puede parecer algo obvio pero no lo es para la mayoría de la gente. La mayoría de nosotros nos involucramos tanto con lo que nos causa el estrés que desestimamos la posibilidad de generar estos pequeños momentos de placer. Las personas viven el estrés de maneras muy diferentes, y lo que puede causar estrés para uno, no tiene el mismo efecto para otro. Lo mismo ocurre con el placer. Quizás tomar un café con una amiga es relajante para vos pero puede estresar muchísimo a otro porque estará pensando en las miles de cosas que no está haciendo porque está utilizando esa media hora para charlar y tomar un café. Cada uno  se conoce a sí mismo y tienen que encontrar qué es lo que funciona para si mismo.

Hoy, simplemente les daré algunas sugerencias para ayudarlos a atravesar su día. Recuerdá que el estrés inhibe el sistema inmunológico y cuando esto ocurre estamos  más vulnerables a contraer enfermedades!
Una técnica de efecto inmediato para relajar el estrés es un baño de pies relajante.
Al llegar a casa, llenamos un recipiente con agua caliente y 1 cucharada de Pedibath, nuestro baño a base de hierbas para pies. Los remojaremos durante 10 minutos y pasado este tiempo los secamos.
Podrán notar que el color, la textura y la temperatura de los pies cambia.
Esto se debe a que, además de haber estado relajándose por unos minutos, su piel ha sido desinfectada y oxigenada en este maravilloso baño de hierbas para pies. Asimismo, el agua tibia ha activado la circulación de la sangre, reduciendo la sensación de cansancio y de calambres en los pies, un problema que surge a menudo cuando estamos cansados y estresados.
¿Vale la pena dedicar unos pocos minutos al día para sentirnos mejor, cierto?
 
 
© Bien BIENESTAR Maira Gall .